La Facultad de Ciencias de la Comunicación, Turismo y Psicología de la Universidad de San Martín de Porres (USMP) acaba de publicar el último libro de Eduardo Herrán, piloto e investigador fallecido en el año 2015, titulado “Líneas de Nasca. De los hombres que dibujaron el desierto”.
Esta obra póstuma recopila las investigaciones, documentación, fotografías y descubrimientos de geoglifos que hizo el autor cuando sobrevoló las zonas de Nasca, Ica y Palpa. Herrán es considerado el pionero de la aeroarqueología en las Líneas de Nasca.
¿Para qué se hicieron los geoglifos y qué expresan las figuras, las líneas y los campos barridos? Herrán quería contribuir a resolver esta pregunta presente en la mente de todas las personas y la documentación obtenida le permitió plantear algunas hipótesis que desarrolla en su libro.
El autor, quien trabajó junto a María Reiche durante los años 80, explica que una figura clave era el cóndor y que parte de los geoglifos fueron hechos como ofrenda a los cóndores y como parte de un ritual para pedir agua a sus dioses. Precisamente la teoría del científico americano Johan Reinhard (en 1988) menciona que los geoglifos fueron realizados en función del agua y la fertilidad.
La obra plantea que si bien las Líneas de Nasca se han conservado por miles de años debido a las condiciones naturales de las pampas donde se ubican, su conservación depende única y exclusivamente de la mano del hombre.
La minería informal con la instalación de plantas industriales, el tránsito de vehículos por las diversas zonas o la construcción de granjas son algunas de las acciones humanas que potencialmente pueden impactar estas expresiones únicas del patrimonio cultural del Perú.
El libro cuenta con un completo registro fotográfico de los geoglifos en las áreas de Ica, Pisco, El Ingenio, Santa Cruz, pero por primera vez se muestra en su máxima expresión la zona de Palpa. Los más de treinta años dedicados a sobrevolar los cielos de uno de los atractivos mayores del Perú se ven reflejados en “Líneas de Nasca. De los hombres que dibujaron el desierto”.
Fuente: portal de turismo