02 enero 2015

Solicitan información a embajadas de miembros de Greenpeace que dañaron el Colibrí de Nasca

Se espera que las embajadas de Argentina, Colombia y Alemania informen sobre cuatro activistas de Greenpeace.


La Segunda Fiscalía Provincial Penal Corporativa remitió una comunicación a las embajadas de Argentina, Alemania y Colombia en Lima, para que informen la identidad correcta de los ciudadanos Rodrigo Abd y Mauro Nicolás Fernández (argentinos), Iris Wiedmann y Herbert Augusto Villarraga Salgado, sospechosos de ocasionar daños en las Lineas de Nasca, así lo confirmó Patricia Begazo perteneciente al mencionado despacho.

“Se les pidió que remitan, en calidad de urgente, no solo la identidad correcta de estos cuatro extranjeros, sino también su dirección en el país de residencia y documentos de identidad pues son investigados por daños contra el patrimonio cultural”, indicaron fuentes de la fiscalía al diario El Comercio.

Tal como se recuerda, los extranjeros, quienes pertenecen a la organización Greenpeace, son investigados por los daños que causaron con sus pisadas en el área cercana al Colibrí de Nasca. El hecho ocurrió la madrugada del lunes 8, cuando extendieron un mensaje contra el cambio climático.


Fiscalía de Nasca suspendió audiencia por inasistencia del director de Greenpeace el 18 de diciembre.
Mientras tanto, el líder de Greenpeace, Kumi Niadoo, continúa en el país para colaborar con la investigación.


Foto: Asociación María Reiche

Opinión
Nuestro parecer en ICArte, es que Greenpeace no trasgredió las leyes peruanas al ingresar en una zona prohibida ocasionando daños irreversibles en un patrimonio tan importante para la humanidad, en una acción sin mala intención, casi pueril de lanzar un mensaje positivo al mundo, sino más bien Greenpeace ha cometido un grave delito con el mezquino objetivo de hacerse publicidad para poder recaudar más donaciones. Greenpeace cuenta con 100 mil socios en España y 3 millones en todo el mundo, las donaciones mensuales oscilan entre 9 a 15 euros pero pueden ser mucho más elevadas estas cifras. Saquen cuentas. 
La prueba de su fría acción está en la fotografía que registra el atentado: observamos el gran espacio que ocupa el distintivo de su organización, el tipo de letra y color para que resalte más, comparado con el área destinada de su etéreo mensaje. Si realmente les importa tanto los resultados en su lucha ¿por qué dar tanta importancia a su logotipo? ¡Que no me cuenten el cuento!. 
La publicidad les iba a resultar muy barata y la prensa se iba a encargar de difundirla en todo el mundo, qué mejor tribuna que las Lineas de Nasca. Si realmente tienen aprecio por el planeta y el cuidado medioambiental, el cuidado del patrimonio no es ajeno a ellos, pues en todo el mundo también son muchos los activistas que defienden esta causa. Si dañaron un importante patrimonio burlando las leyes del país ¿realmente son activistas a conciencia o meros teatreros?
... Saquen sus conclusiones. Tienen que pagar los daños y alguna institución internacional debe revisar sus cuentas. 3 millones de socios en todo el mundo a 9 euros mensual cada uno, por decir lo menos... tienen como para pagar una gran multa, puesto que el daño que hicieron en los importantes geoglifos ya no se puede reparar.